Cromlech – Ascent of Kings (Hessian Firm, 3 de marzo de 2023)
Abrimos la veda de discos del año en curso con el esperadísimo segundo asalto de Cromlech, que nos llega de la mano de Hessian Firm. Justo diez años después de su debut, y con poco más que un destacado EP publicado entre medias, el epic heavy metal de estos canadienses vuelve a brillar con la misma personalidad de siempre, pero a través de un enfoque más firme y centrado. Estamos ante un disco de heavy metal clásico en el que hay cabida para claras influencias del speed metal que sirven para recrudecer los ritmos y endurecer el tono, sin menoscabo de la epicidad, pero también otras más sutiles de estilos extremos más recientes que los mismos miembros practican en otras formaciones, como Into Oblivion, de la que en origen el grupo que nos ocupa fue prácticamente un proyecto paralelo.
La naturaleza particular de esta formación se nota ya a nivel de las influencias concretas, puesto que por lo general bebe de grupos heavies del espectro épico relativamente poco conocidos, como Solstice, Brocas Helm o Cirith Ungol. La voz es también un tanto peculiar, aunque uno se termine acostumbrando, y entronca con una reciente tradición de grupos de metal clasicista que exhiben voces curiosas y no convencionales, como puedan ser Eternal Champion, Argus o los mismísimos Atlantean Kodex. Cuando aparece desdoblada puede llegar a saturar, pero justo es reconocer que en el aspecto técnico la ejecución ha mejorado con los años. Otro punto que los desmarca positivamente es su habilidad poco frecuente para saber cómo cerrar canciones que en ocasiones son casi interminables, a pesar de que los músicos afirmaran en alguna entrevista del pasado hallarse en busca de formatos más breves.
Una crítica objetiva señalaría que el álbum podría ser mucho más sucinto y condensado, pero la abundancia de interludios y repeticiones se ajusta muy bien a la atmósfera épica y cinematográfica que el grupo pretende transmitir. Los coros con voces graves que aparecen en más de una ocasión parecen apuntar, por su parte, a la liturgia religiosa eslava, que varios de los miembros conocen bien debido a su vínculo con la comunidad ucraniana de su país. Figuran también intermedios acústicos de cuerda con cello y violín, que tienen el encanto de estar ejecutados por colegas del grupo en lugar de músicos mercenarios. Pero sin duda lo más destacable dentro de su estilo es el empleo de partes de canciones muy marcadas y diferenciadas, así como el uso de motivos de una forma similar al que hacen las bandas sonoras.
Dentro de la apuesta por la aspereza y el poder que caracterizan al heavy metal más puro, se percibe claramente un planteamiento casi progresivo en la manera de hacer avanzar los temas largos, separándolos por partes al modo del rock sinfónico y combinando las distintas secciones dentro de un desarrollo lógico en el que los motivos ocupan un lugar preeminente. Los guitarristas emplean una especie de reiteración evolutiva que introduce constantemente bloques de guitarra con riffs que van mutando poco a poco y encajando a la perfección como piezas de una historia, con mucho contenido puramente instrumental. Esta es indudablemente una de las mejores cosas que tiene este álbum, junto con el enfoque casero e independiente que lo hace único, pese a mantener una forma canónica que no renuncia ni a los falsetes, cortesía de un amigo invitado.
Sin desmerecer a sus anteriores trabajos, este es un excelente disco de heavy metal, que sabe respetar la tradición siendo al mismo tiempo personal y atípico, y hace justicia a la vertiente epic heavy metal y su querencia por la literatura heroica y fantástica, con Tolkien y Robert E. Howard a la cabeza. Es una versión algo más concreta y clara de lo que se escuchaba en su debut Ave Mortis (2013), aunque haya dejado por el camino el intento de mayor concisión que fue su epé Iron Guard (2017). Pero lo más importante es que consigue marcar su propia huella en un terreno ya conocido y explotar en su beneficio las virtudes de un género establecido cuyo horizonte es tan atemporal como las temáticas eternas que inspiran a estos músicos a seguir creando.
Escuchando: Maggot Crown – 2023 – Apparition of Faces